En una entrevista concedida a COPE Puertollano por el secretario de la Asociación Amigos de la Venta de la Inés, Eduardo Egido (se puede escuchar en archivo adjunto) explica las reiteradas ocasiones en las que la citada Asociación se ha dirigido a la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir sin recibir respuesta alguna en la petición de hacer cumplir la sentencia recogida por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía.
En el texto de la última carta enviada el pasado mes de Septiembre , Egido expresa que “detrás de los aspectos legales, y más importante si cabe que ellos, se encuentran las personas que mantienen la aspiración de que el agua del río Tablillas llegue a la Venta de la Inés como ha sucedido a lo largo de los siglos. El propietario de la Venta, Felipe Ferreiro, inició este proceso el 8 de septiembre de 2003, cuando contaba con 73 años de edad, sin duda con la esperanza de lograr en vida su propósito. Hoy cuenta con 86 y su salud está quebrantada por su ya larga vida. Vive permanentemente en la Venta con la sola compañía de su hija Carmen, discapacitada física y psíquica de 58 años. Frente a él está el propietario de una de las mayores fincas del Valle de Alcudia, la Cotofía, titular de la empresa Patrimonios y Negocios S.A empeñado, cueste lo que cueste, a que el agua no llegue a la Venta, quizá porque ese agua se hurtaría a la que alimenta el embalse ilegal de 2,35 hectáreas que se ha construido al lado de su mansión, con embarcadero incluido. Sobre el papel, se trata de una “balsa pluvial” a la que solo cabe objetar que represa el río Tablillas, que desaparece en ese punto para no volver a aparecer hasta un buen trecho después.
Quien visite en estas fechas el paraje, podrá observar los estragos de la sequía en los terrenos colindantes a la Venta de la Inés en contraste con el vergel que rodea a la mansión de la Cotofía, embellecido con espectaculares esculturas del afamado escultor y pintor colombiano, Fernando Botero.
A lo largo de todos estos años han sido multitud las personas que han desfilado por la Venta de la Inés y que se ha indignado escuchando el relato de las tropelías – la negación del agua es sólo una de ellas- que comete “el poderoso” ( así se refiere Felipe Ferreiro para nombrar a su vecino). Así nació la Asociación de amigos “Venta de la Inés” que cuenta con asociados de distintos puntos de la geografía nacional. Durante este tiempo, la familia de Felipe Ferreiro ha dado pruebas de una hospitalidad sin límite, abriendo la puerta de su casa a cuantos llaman a ella. Ninguno queda insensible ante el relato de los hechos. (…)
En definitiva, señor presidente, apelamos a su sentido de la justicia y a su sensibilidad para que atienda nuestra solicitud de que se efectúen los trámites precisos para la concesión de la servidumbre de paso mencionada y no queden burladas tantas y tan importantes sentencias judiciales a lo largo de tan dilatado periodo de tiempo.”
Por otro lado la Venta de la Inés junto con el paraje cervantino de la Fuente del Alcornoque, a unos quinientos metros de la alquería está considerada como Bien de Interés Cultural. Mientras que la Venta es visitable, sin embargo el acceso a la Fuente y desde allí a la Cueva de la Inés , unos dos kilómetros aguas arriba del río Tablillas está cortado por una puerta con candado por estar en la Finca La Cotofía. Este acceso sólo se abre previa petición a la dirección provincial de Patrimonio algunos sábados del año en horario sólo de mañana, en un periodo muy restrictivo. La Asociación ha solicitado la ampliación de los sábados de visita para que el entorno de esta zona del Valle de Alcudia pueda ser visitado por senderistas y conservacionistas que deseen descubrir uno de los parajes más hermosos de la provincia.
Audios disponibles