Vida

Son las 17:20 del Sábado, 4 de Mayo del 2024.
Entonces, estabas aquí.
Estuviste aquí siempre:
Entre los intersticios
de las placas tectónicas,
en todo lo que carece
o tiene miríadas de lógica.
Y yo, distraído, sin verte…
Estuviste aquí siempre,
arrastrada por los vientos
dominantes del oeste,
en el silíceo de la roca madre,
en las aguas de escorrentía,
en el hielo de los glaciares,
en el sudor frío de la vendimia
en todo lo visible y lo invisible…
Has estado aquí siempre
y ahora sé que eres tú:
La sutil lírica del amor,
el drama de la muerte,
la perpetua juventud,
la elíptica del cometa
que dejó su estela perdida
en el erial del frío universo.
Tú siempre has sido eso:
¡El raro milagro de la vida!