Gracias a ello han recalado ya en el municipio diez pantallas, medio centenar de guantes de nitrilo, 30 mascarillas, seis buzos y diez batas, así como tela homologada para que Toñi siga confeccionando en su casa mascarillas como las 50 que, hasta la fecha, han podido ser ya repartidas.
Un contingente de emergencia que no hubiera sido posible sin la implicación de mestanceños que, aun en la condición de no ser ya residentes en una mayoría, siguen muy pendiente de la suerte de sus paisanos y por, eso, Toñi, Jesús, Jose, Carmen, Ana, Jimena y cuantas otras personas están colaborando con ellas, así lo han hecho posible.
“Este Ayuntamiento les agradece el esfuerzo y la movilización que han llevado a cabo y siguen haciendo, incluso a quienes, con ellos, aun no siendo de Mestanza, hacen cuanto está en sus manos para colaborar con nosotros”, apunta Santiago Buendía, encargado personalmente de ir a diferentes poblaciones para hacer acopio del material donado.
Además, y como nota curiosa, una de estas personas está afincada en la localidad de Porzuna, población con la que Mestanza comparte patrón, como es san Pantaleón y que, como refiere el regidor mestanceño, “fue médico y a su intercesión también nos encomendamos como benefactor y galeno”.
Buendía, que también se ha encargado de repartir por el municipio fundamentalmente mascarillas entre vecinos con mayor necesidad para cuando salen a la calle a hacer las necesarias compras de comida, lamenta que, a diferencia de otras poblaciones en la provincia e incluso de la comarca, todavía no haya recalado material de instituciones.
El “olvido” de Junta de Comunidades y Diputación
Ni de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha ni de la Diputación Provincial de Ciudad Real, la cual la semana pasada anunció que empezaba la distribución. El alcalde achaca este “olvido”, como irónicamente lo da en llamar, asegurando que “llevo en política desde el año 1991 y sé de lo que hablo”.
Por eso Santiago Buendía constata a su pesar que “este rinconcillo de aquí de San Lorenzo [de Calatrava], de Hinojosas [de Calatrava] y Cabezarrubias [del Puerto], Mestanza, El Hoyo y Solana del Pino, parece ser que no existimos de nunca en la historia democrática de este país”.
Por otro lado, el regidor insiste en sus razones por las que censura a las autoridades sanitarias ante la falta de datos oficiales sobre la incidencia real del Covid-19 en los municipios y del número de afectados “para poder actuar más en concreto y ayudar, desde la cercanía más a la gente, a sus familias y a sus allegados”.
“Aunque en un pueblo como el nuestro se sabría si sucede algo así y hasta ahora no hay ninguna, no es entendible que pueblos como en Teruel sepan que no tienen ningún caso oficial y aquí en nuestra región incluso el Tribunal Superior de Justicia esté dudando de que se esté contabilicen toda la mortandad causada por el coronaviros”, zanja el alcalde.
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