« Mi libertad termina donde empieza la del otro »
Uno de estos días se celebró en el pueblo de mi padre, Riopar, en la sierra de Alcaraz que es provincia de Albacete, una especie de encuentro al que han llamado « Jornadas mutantes ». Una de sus actividades fue la de realizar una ofrenda a la Virgen de los Dolores, patrona del pueblo. En ella apareció la Virgen travestida sentada en un carrito de supermercado. En torno a ella bailaban dos chicas, senos al aire, « La Pita », jota manchega del lugar. Otros, bien abrigados (siempre se desnudan los mismos) observaban y participaban del espectáculo exhibiendo con fervor espiritual la adhesión, birras en mano, la adhesión a esta forma de expresión de la intolerancia : la burla y la provocación. Como no podía ser de otra manera, los medios acudieron raudos a dar pábulo al evento. Incluso merecieron el interés y la presencia de la televisión regional.
Mi primera reacción fue : ¡ Válgame Dios !, lo que hay que hacer para salir en la tele… Luego adopté una actitud de « escucha reflexiva » integrando las reacciones de estupor, burla, indiferencia o rechazo que mis amigos y vecinos del pueblo iban trasmitiendo al tiempo que ordenaba en mi conciencia la memoria de todo lo que este asunto me evocaba : de dónde venimos, quienes somos y sobretodo, a dónde vamos.
Las aventuras arriesgadas son dignas de valorarse cuando son pioneras porque es entonces cuando pueden aportar algo. Pero, ¿ Qué intentaban demostrar estos « mutantes serranos » ?. Quizás al rebufo de los acontecimietos de Charlie Hebdo pensaron que era ya hora de modernizar la Sierra de Alcaraz. Quizás pensaron que detrás del slogan « Todos somos Charlie » podían encontrar un hueco en los medios que les permitiese dar un mensaje de cambio a la Sierra de Albacete. Pero ese slogan es una manera de reivindicar la libertad de expresión y el derecho a la vida por defenderla y no de aprobar el estilo del semanario satírico, criticado por una parte de los franceses. Estos se arriesgaron y pagaron por ello. Injusto, sí, pero asumieron con dignidad las consecuencias enviando como respuesta un mensaje de fraternidad: « Todo está perdonado ».
Europa está en la cuerda floja y esto lo están aprovechando perversamente los sectores sociales a los que la concordia no interesa. Por razones políticas y económicas, no tanto religiosas. Pero los mutantes serranos caen en la trampa haciendo un ejercicio de provocación y radicalidad torpe y soez en momentos en que no son ni necesarias ni deseables. He aquí otros que instrumentalizan la religión para alcanzar sus propios objetivos.
Els Joglars ya hicieron algo parecido pero con mucho más arte y sentido en la Sevilla de los primeros años de la transición cuando la religión tradicional representaba una mordaza para muchos cristianos, agnósticos o incluso ateos. ¿ Pero porqué ahora ?. Hasta el Papa Francisco nos está diciendo poco a poco pero claramente, que Dios está en el cielo y la Iglesia en la tierra. Ahora que la Iglesia está empezando a aceptar la evidencia sin esperar a pedir perdón dentro de 20 años por sus consecuencias, ahora que la curia esta decidida a colaborar con la justicia para limparla de morralla, Ahora que, por primera vez se atisba que el poder esta dejando de ser el motor fundamental de la Iglesia para ocuparse del sufrimiento del hombre.
Se necesita una sociedad valiente y comprometida que lidere el cambio que nuestro pais necesita. Una sociedad que conozca bien su historia para no repetirla. Afortunadamente o desgraciadamente el gesto de los mutantes serranos va en el sentido de la réplica, de lo dejà vu y dejà vécu. Aquella herida sigue abierta y todo fue tan amargo que haremos todo para que la moderación y el respeto sean los valores troncales que nos permitan avanzar y salir del lío en el que estamos metidos. Cualquier cosa menos repetir nuestra historia.
En España tenemos la « jodida costumbre » de luchar por lo nuestro criticando, negando o aniquilando las ideas de los otros. Siempre existe un contrario, un enemigo, un contramodelo que inspira y motiva la acción propia. ¡ Soberano error !. No se puede generar nada sano en estas circunstancias. El entusiasmo de unos es la frustración de otros. Esto es más un modelo de funcionamiento animal que humano. Se acabaron los tiempos de las religiones verdaderas, de los valores eternos. Ahora que han fracasado comunismo y capitalismo. Ahora que se está desenmascarando la Gran perversión nos empeñamos en encontrar otra fórmula que haga que, en el fondo, nada cambie. Será por equilibrio homeostático o por, como decía Sigmund Freud, por compulsión de repetición. ¿Cómo será la nueva revolución que nos espera ?
Yo invito a los mutantes serranos a ser rebeldes, a que nos sorprendan con algo nuevo. Que colaboren para ser transgresores con el destino de nuestro pueblo. En la historia no faltan ejemplos : Pink Floyd quiso enviar un mensaje de rebeldía ante los valores educativos tradicionales y publicaron « The Wall ». Algunos pagaron esa rebeldía con la vida : Miguel Servet descubriendo la circulación menor ; Martin Luther King en la defensa de los derechos civiles de los negros ; o Ghandi prototipo de la lucha a través de la no violencia o con la cárcel como Nelsson Mandela y tantos otros…
Mutantes serranos, resolved vuestros conflictos personales y/o colectivos. Tomad ejemplo y aportar algo original a la Sierra y más allá si es posible. No repitáis las atrocidades que otros serranos cometieron en el pasado. ¿ Sabíais que la Virgen de los Dolores que se venera en Riopar no es la original ?. Aquella, obra maestra de Salcillo, fué destruida, en la bacanal de sangre y odio que fue nuestra guerra civil.
Un sentimiento compasivo, probablemente espiritual, me está invadiendo conforme le daba vueltas al asunto y tras volver a ver La Pasión según San Mateo de Pierre Paolo Passolini, le dí otra interpretación a esta ofrenda a la que puedo y quiero adherir : La pretendida Virgen de los Dolores con barba es más bien la encarnación de Cristo en su madre. Porque cuanto más miro a esta Virgen más veo a su hijo. Creo que una fuerza extraña os ha ayudado a establecer una cierta coherencia, a pesar de todo, a vuestro mensaje, perfectamente compatible con el mensaje de Cristo : Compasión y universalidad : integración de todos los hombres y mujeres : serranos y urbanos, radicales y moderados, ricos y pobres, homo y heterosexuales, blancos y negros, vestidos y desnudos.
Pero, hay algo que me sigue sacando de mis casillas : el carromato ese. ¡ Que horterada !. Chaval, no seas zoquete y bájate de ahí, ¡ so catral !. Y, andaros con cuidao que el Tio la Vara, que no anda lejos, por el campo de Montiel, os va a moler en cuantico que la vieja’l visillo le de conformidad.
Los mutantes serranostodavía no se han dado cuenta de que, a Dios gracias, la religión ya no es el opio del pueblo. Dejad a los abuelos tranquilos. Sus tradiciones y sus creencias son de las últimas cosas que van a olvidar. Tened el valor de arriesgar de verdad con algún gesto original. Aunque solo sea para que estemos todos orgullosos de unas generaciones de serranos que, al fin, trabajaron por superar las heridas del pasado.
Miguel Marset