Así lo han comprobado estos días sobre el terreno el alcalde José Lozano y el concejal de Medio Ambiente, Fernando Torres, quienes valoran como a pesar de la época estival las previsiones ofrecidas por la firma adjudicataria, AQLARA, se están cumpliendo.
Los primeros trabajos completados han sido la demolición de las antiguas instalaciones que ocupaban la parcela donde se levanta la nueva EDARU, así como en la adecuación de los diferentes espacios necesarios para el funcionamiento de la infraestructura.
El aplanamiento de la parcela, de 8.632 metros cuadrados, se hace a la vez que se instala el nuevo colector de PVC corrugado, de 630 milímetros de diámetro y 961,34 metros longitud, al otro lado del camino por el que discurre en paralelo el arroyo Lino.
Colector que va a conducir hasta la nueva depuradora las aguas brutas desde la confluencia de los dos colectores que, tras recoger las aguas de la localidad, confluyen al otro lado de la variante de la carretera CM-4115.
Y cabe también destacar que las gestiones efectuadas durante estas semanas han permitido reactivar la línea de abastecimiento eléctrico que se ejecutó en la década de 1990 para dar suministro a la EDAR que nunca funcionó, gracias a lo cual no es necesario ejecutar una nueva línea de aporte eléctrico.
Para Fernando Torres, “después de años y años de promesas incumplidas, algunas por escrito y el nulo interés del Gobierno de Castilla-La Mancha bajo el mandato de Page, demostramos que con voluntad las cosas y proyectos como éste se pueden hacer”.
Además, añade el también portavoz del equipo de Gobierno, “esta importante infraestructura, cuyos costes de ejecución no se van a trasladar a la ciudadanía, es un paso vital para retomar nuestro proyecto de Plan de Ordenación Municipal”.
El munícipe recalca que la buena salud económica de las arcas municipales en el Ayuntamiento de Almodóvar del Campo, bajo la gestión que encabeza José Lozano, “hace posible sufragar en exclusiva con fondos propios la tan necesaria depuradora”.
AQLARA Ciclo Integral del Agua SL se comprometió en la firma del contrato tras la licitación correspondiente a concluir el proyecto de ejecución en un plazo de doce meses, asumiendo a continuación la concesión de la gestión del servicio por espacios de 25 años.
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