Así lo recoge el escrito de conclusiones provisionales del Ministerio Fiscal al que ha tenido acceso este viernes EFE en el que se detalla que los hechos tuvieron lugar el 14 de febrero de 2021 cuando el procesado, junto con su pareja sentimental, la hija de ésta y su compañero sentimental, acudieron a comer al domicilio de unos amigos, padres de dos hijos menores de edad de 2 años y 9 meses.
Sobre las 17:00 horas, y una vez que terminaron de comer y echar la siesta, todos salieron al patio de la vivienda quedando tan solo en el salón el bebe de 9 meses y el procesado, el cual con claro ánimo de satisfacer su apetito sexual procedió a llevarlo a la cocina.
Una vez allí, el acusado trató de abusar el bebé, aunque no logró su objetivo al ser sorprendido por la hija de su pareja, que había pasado de nuevo a la vivienda para acudir al aseo y que reaccionó con fuertes gritos y reproches cogiendo al bebe en su regazo, lo que ocasionó que el resto de familiares y los padres del menor acudieran inmediatamente al lugar.
Tras los hechos, el juzgado de Puertollano acordó imponer al procesado la prohibición de aproximación al menor y a sus progenitores durante la tramitación de la causa hasta resolución firme.
Los hechos, según la Fiscalía, son constitutivos de un delito de abuso sexual por lo que procede imponer al acusado la pena de siete años de prisión y pide, además, que sea castigado con la prohibición de aproximación al menor, a su domicilio y guardería o centro de estudios a menos de 300 metros, así como comunicarse con él por cualquier medio durante el tiempo de condena más 5 años.
También insta al juzgado a que acuerde imponerle la medida de libertad vigilada por el tiempo de cuatro años.
EFE
