Cuando el fútbol es la excusa...

Por Fernando Romero

Este pasado miércoles se llevaba a cabo la presentación del partido que medirá a los Veteranos y Colaboradores del Atlético Puertollano con las Leyendas de España. Una presentación que tuvo lugar en el Ayuntamiento y que contó con la presencia de Fernando Giner, jugador y presidente de la Asociación de Veteranos de la Selección Española de Fútbol, Alfonso Pérez y Ricardo López. Todos ellos internacionales que han conseguido triunfar en el futbol de élite. Ese que solo está al alcance de los elegidos. Ese con el que sueñan tantos niños pero al que solo acceden unos pocos.

Entre ese grupo están los jugadores anteriormente mencionados que llegaron en AVE hasta nuestra ciudad y que, desde ese momento, se dejaron llevar y se pusieron a disposición de los veteranos atléticos para estar a la altura de lo que se espera de ellos.

El guión marcaba rumbo al consistorio municipal, para ser recibidos por el Concejal de Deportes y para pronunciar sus primeras palabras como Leyendas de España en Puertollano. Más allá de lo que en la presentación del partido se dijera, que ya lo sabrán por los diferentes medios que cubrieron dicha presentación, toca detenerse en el aspecto en el que mejor se defendieron y donde más a gusto se les vio: la visita al Centro Aspades – La Laguna.

Repartidos en dos coches, y lógicamente más cómodos (el susto inicial de visualizarse cual lata de sardinas ya se les había pasado tras el trayecto Estación – Ayuntamiento) llegaron al Centro Aspades donde les esperaban cientos de personas con camisetas de la selección española, con banderas y con las caras pintadas en muchos de ellos que hacían que desde el mismo comienzo de la visita ya sintieran los internacionales el calor y el cariño de los allí presentes.

LA VISITA AL CENTRO, FELICIDAD PARA TODOS

Es esta visita uno de esos momentos donde te das cuenta de la magnífica labor que se realiza en este tipo de centros. Los jugadores (porque como decían en la presentación “siempre seremos jugadores aunque ya no estemos en activo”) se dieron un baño de masas. Daba igual el escudo que hubieran defendido, si eran del Madrid, del Valencia, Betis, Osasuna o del Atlético de Madrid. Daba igual. Para los que allí estaban eran “famosos” que habían defendido con orgullo y honor la camiseta de todos, la de la selección española. Con el paso de los minutos empezaron a sentirse como en casa, cómodos y disfrutando el momento rodeados de muchos “fans” que no querían irse a casa sin tener la firma de Giner, Alfonso o Ricardo (o de los tres, que “eso sí que mola”, me dijo alguno)

Quizá lo mejor de ese momento fue que durante una hora se olvidaron de que eran “los protagonistas”. Porque realmente los protagonistas fueron todos los que acompañaron a estos internacionales en su visita a su centro de Puertollano. Y, mención especial por supuesto, a los profesionales que están día a día con todos y cada uno de ellos para hacer que su calidad de vida sea mejor. Nunca se les podrá agradecer su esfuerzo, su cariño y su dedicación para hacer de los chicos y chicas, hombres y mujeres, de Aspades – La Laguna sean un poco más felices.

Tras la visita al Centro, y camino de los coches para ir a visitar el estadio Ciudad de Puertollano donde jugarán su partido el sábado 27 de Mayo, el comentario era solo uno: “qué mérito tienen todos los profesionales que están con estos chicos”, “es increíble lo que hacen”, “en este tipo de cosas es donde la administración tenía que invertir el dinero” y yo, días después, apostillo: “y qué poco se les valora y se les reconoce su gran labor”. Una vez que he tenido la oportunidad de verlo un poco más de cerca, les invitaría a que se pasaran algún día por el centro. Lo mismo desde ese momento ven la vida de otro modo y empiezan a valorar el trabajo que hacen por todos los que forman parte de esa “familia”.

Continuaba la visita de los tres internacionales visitando el Cerrú, que creo que fue de su agrado. Incluso se escuchó: “pero... ¿es grande el terreno de juego eeeeh?” (si eso lo dicen ellos… qué estarán pensando los veteranos y colaboradores atléticos que ese día también disfrutarán del partido…). Allí estaba esperando Alberto Rivera, al que se le llamó porque, especialmente Alfonso, quería saludarlo. Un rato (corto) de charla amigable sirvió para poner punto y final al estadio Ciudad de Puertollano.

LOS VERDADEROS HÉROES

Terminaba la visita con una comida en el Asador del Club. Se buscaba algún lugar donde pudieran degustar la calidad de la gastronomía manchega. Sabíamos que era el sitio adecuado, el lugar perfecto. Nunca defrauda. Y allí es donde se acabó de confirmar lo que veníamos sospechando desde que salieron del Ayuntamiento, que fue cuando más relajado estaba el ambiente. Son “personas normales”. Sí, así como lo leen. Personas normales, con sus preocupaciones normales, con sus conversaciones normales, con su vida normal… Digo esto porque los tenemos tan idealizados que imponen respeto. Cuando me preguntaban por la tarde “¿qué tal son?”, mi respuesta era tajante: “como nosotros, ni más ni menos”. Y es que al final, cuando a las 15:45 horas entraban de nuevo en la estación para abandonar Puertollano, te das cuenta que has pasado una mañana de lo más agradable con futbolistas que son Leyendas de España y que tienen la humildad por bandera. Has compartido tres o cuatro horas con señores que han conseguido éxitos deportivos al más alto nivel, pero que ni una vez se habló de ello. Quizá ni les apeteciera. Quizá estuvieron mejor hablando de lo cotidiano (hasta de dónde comprar pienso para el ganado), y creo que no olvidarán su visita a otros héroes que nada tienen que ver con el fútbol: a los héroes del Centro Aspades – La Laguna.