Con la lección aprendida y con la moral renovada, saltó Salesianos al Gemma Arenas de Almagro. Desde el primer minuto marcó cómo iba a ser su comportamiento sobre la pista. Presión alta sobre la salida de balón sobre el equipo encajero y mordiente para finalizar las jugadas de ataque.
Las de Jaime García dieron el primer aviso cuando tan sólo habían pasado un par de minutos, con un disparo de Ale, que atajó bien Elisa. La respuesta del equipo de Carlos Moreno no tardaría en llegar, obligando a Alba a sacar su repertorio de paradas.
Fue a balón parado como se desequilibró el marcador, con un zapatazo de Patri Oliveros a cuatro metros del balcón del área, colándolo en la misma escuadra de la portería encajera.
Le costó a las de Almagro reaccionar al tanto, sin encontrar la vía para llegar hasta la portería rival. Fue Elisa, golpeando la pelota desde su portería como sorprendió a la defensa de Salesianos, que esperaba la peinada de Mayte.
Cuando parecía que de nuevo iban a igualarse las fuerzas sobre la pista, las de Puertollano reaccionaron de forma valiente y de nuevo, en otra jugada de estrategia, volvió a poner la diferencia en el electrónico.
Apertura de Latorre para Peña y con la izquierda, disparo con la izquierda hasta al fondo de las redes. Con este resultado se irían los dos equipos al vestuario, dejando toda la segunda mitad para zanjar esta eliminatoria de Copa de la Reina.
A los segundos veinte minutos, Salesianos salió con los cuchillos entre los dientes, para defender lo que ya había conseguido. El objetivo era mantener el resultado atrincheradas sobre su propio campo y tratar de hacer daño a la salida.
Así se dispusieron las jugadoras de Jaime García sobre la pista poniendo sobre la mesa la capacidad de trabajo que son capaces de hacer para disputar cualquier partido.
Las sombras amarillas se extendían por toda la cancha, ahogando cualquier jugada de ataque de Almagro que veía cómo corrían los minutos sin acercarse con peligro sobre la portería de Alba.
De hecho, fue Salesianos quien fue dejando avisos, con tiros lejanos y jugadas de estrategia que, sin embargo, no llegaron a entrar en la meta defendida por Vera.
Cuando faltaban cuatro minutos para el final, el equipo local empezó a jugar de cinco buscando un empate que no llegaría. Salesianos pudo sentenciar aprovechando los huecos y la falta de portera, pero el marcador, caprichoso siempre, ya no se movería.
Con esta victoria, un año más, Salesianos pasa el primer corte de la Copa de la Reina, en un partido fabuloso, donde hizo un trabajo defensivo perfecto y donde machacó en las ocasiones que dispuso.
