Dos hermanos mellizos, Dani y Dorian, pierden el autobús a la Escuela de Magia. Lo que debía ser el principio de su educación como brujos terminará en una serie de aventuras —y algún que otro lío— en las que conocerán a nuevos amigos de lo más dispares: Nico, el más gamberro de todos los chicos del lugar; la cursi y romántica princesa Mónica; el apuesto y reservado Mark; Pendragón, el mentor más despistado, e incluso una mascota de lo más extraña. Lo que Dani y Dorian no esperaban era ser perseguidos por varias familias mágicas muy poderosas, que creen que uno de ellos dos es el Rey de las Brujas de una profecía