En la mayoría de las tradiciones yóguicas, el término “siddha” significa “ser que ha alcanzado una gran perfección” y también “el que ha logrado siddhis o poderes”.
Dentro de la tradición del Tantra, vinculada al Hatha Yoga, Matsyendranath fue un gran “siddha”. Este maestro tántrico, con poderes omniscientes, fue asimismo un renovador del Hatha Yoga. Las leyendas acerca de sus poderes son numerosas e incluso se le atribuye la inmortalidad. Una advertencia para el lector: en India, al escribir sobre grandes personajes, los escritores se dejan llevar a menudo por el entusiasmo y son dados a la hipérbole. Por tanto, hemos de tomar ciertos asuntos con las debidas precauciones.
El sabio Matsyendra, al que también se conoce como Minanath, se transformó en pez para oír a escondidas el diálogo que mantenían Shiva y su esposa Parvati en una barca. Escuchó las instrucciones "secretas" y formuló el yoga a partir de ellas. También se le atribuye el siddhi o poder de abandonar su cuerpo para entrar en el de otra persona, con el propósito de eliminar los obstáculos en la mente y la psique de esta, y una vez logrado, regresar a su propio cuerpo. El conocimiento de un nadi secreto era esencial, y solo un maestro haría esto en circunstancias excepcionales. A una escala menor, un gurú altamente evolucionado también elimina los obstáculos en la mente de sus discípulos.
GORAKSHANATH
Un gran sabio y un discípulo igualmente consumado: Matsyendra y su discípulo Gorakshanath. Qué ser tan divino, plenamente dedicado al renacimiento del yoga para acercarlo al común de las gentes. Él y sus discípulos proporcionaron a India y al mundo la mejor tecnología y metodología de kriyas, asanas, pranayamas, bandhas, mudras y prácticas meditativas. Complementó al gran sabio Patanjali, autor de los “Yoga Sutra”, completando lo que éste había explicado antes con suma brevedad. Sus siddhis fueron su poder de enseñar y de servir, además de la omnisciencia que se le atribuye.
LOS KANPHATAS, DISCÍPULOS DE GORAKSHANATH, Y SU LINAJE
El término Kanphata significa “el de la oreja perforada”. Cuando alguien es invitado a seguir la tradición Kanphata, se hace una pequeña incisión en la oreja del iniciado y, durante meses, se va agrandando hasta quedar un orificio en forma de lágrima en el que se inserta un kundal o anillo. Se afirma que esto le da el siddhi de controlar el deseo sexual, cuando es necesario.
LOS YOGUIS NO BUSCAN PODERES
Los yoguis carecen de todo interés en hacer exhibicionismo de sus siddhis. Estos poderes llegan de forma natural en el transcurso de una intensa Sadhana (práctica), y si los hemos mencionado aquí es únicamente para dejar constancia de ellos.
Una vez se le preguntó a un Siddha: "Guruji, ¿puedes desaparecer de nuestra vista?” A lo que contestó: "Deja que surja la ocasión. Entonces te responderé". Moraleja: ¡No preguntes a los yoguis por sus siddhis!
Harold Sequeira, Maestro de Yoga en The Yoga Institute (India)
-Traducción: Juan Felipe Molina-
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