Una meditación del Vijnana Bhairava Tantra

Escucha la radio con La Voz de Puertollano
La voz de Puertollano
La Voz de Puertollano en Facebook
La Voz de Puertollano en Twitter
Son las 12:58 del , 9 de Febrero del 2025.
Una meditación del Vijnana Bhairava Tantra

 

Meditación mirando profundamente un pozo o, como alternativa, contemplando un cuenco.

Esta es una excelente meditación del Vijnana Bhairava Tantra, un compendio de meditaciones que el dios Shiva expone a su esposa Parvati

 

Dice el Vijnana Bhairava Tantra: “Y el Señor Shiva, mirando fijamente los ojos celestiales de su esposa Parvati, le dijo con voz suave: ‘A una hora ni demasiado temprana ni demasiado tardía, acércate a un pozo profundo y observa detenidamente su brocal, dejando que tus ojos se detengan allí por un rato. Y gradualmente, deja que tu mirada se adentre más profundamente en el pozo hasta que llegue a la superficie del agua. Deja que tu visión more allí por un tiempo y después, lenta y suavemente, deja que tus ojos se hundan más en el pozo’.”

Los ojos son muy dados a vagar y deambular constantemente. Y junto con los ojos se mueve la mente. ¿Qué ocurre si restringes tu visión a un lugar cerrado como un pozo? Pues que la actividad mental se reduce y, finalmente, se detiene; es lo que Patanjali llama en los Yoga Sutra la etapa de “Citta vritti nirodha”, cuando las oscilaciones de la mente cesan.

Nuestra sadhaka, antes monja católica acostumbrada a la meditación, contempla un cuenco

“M”, ahora una persona mayor y profesora nuestra de yoga en la bucólica ciudad costera de Santander, cerca de las majestuosas cumbres de los Picos de Europa, fue iniciada por mí hace 7 años en esta joya de la práctica meditativa que es la de contemplar un cuenco, en vez de un pozo. Ella se puso manos a la obra de inmediato y en pocos días empezó a enviarme comentarios sobre los efectos extraordinarios de esta meditación:

“Me sentaba en una silla cómoda, con la espalda recta, ponía un taburete frente a mí, colocaba sobre él un cuenco de cerámica, lleno hasta un tercio con agua (todo esto imitando un pozo), miraba fijamente el cuenco, desde el borde hasta el fondo, y poco a poco, perdía la sensación de tiempo y espacio, y me atrevo a decir que experimenté una condición de trance, permaneciendo en un estado extático durante más de una hora.’

“M” sigue haciendo esta meditación con regularidad y ha encontrado paz y estabilidad mental, gracias a las bendiciones del Señor Shiva y su guía masterji de la India.

Vijnana Bhairava Tantra

Masterji también ha enseñado algunas meditaciones del Vijnana Bhairava Tantra a otros estudiantes, especialmente las técnicas de parada, con resultados igualmente buenos.

Si decides probar la meditación de contemplar un cuenco, que las bendiciones del Señor Shiva sean contigo. Te encantará.

 

Harold Sequeira

Maestro de Yoga en The Yoga Institute de Bombay (India)

Ilustración: Shiva meditando sobre el monte Kailash, nevando, obra de Harold Sequeira

Traducción del inglés: Juan Felipe Molina