El Atlético Puertollano se suicida en el Cerrú (3-3)

Por Fernando Romero

Hay cosas que solo es capaz de hacer el Atlético Puertollano. Un equipo que es capaz de lo mejor y de lo peor en tan solo cinco minutos. Si no hace mucho decíamos que los puertollaneros entraron quince minutos tarde al partido, en esta ocasión podemos decir que terminaron el partido en el minuto 85, olvidándose del dicho que de que hasta que no pite el árbitro el final, no hay nada sentenciado.

Y es que la imagen que mejor refleja el partido de este domingo del Atlético Puertollano es la cara con la que con los jugadores enfilaron el túnel de vestuarios al término del choque. Para los más finos, con cara de “incredulidad”. Para los menos finos, con cara de “tontos”. Y es que no se acaba de entender como ganando por 3-0 en el minuto 86, el partido puede acabar en tablas. El gran beneficiado, el Cultural Valdeganga, que celebraba el punto como si se hubieran alzado con el título de Campeones de Europa, puesto que casi les asegura continuar un año más en la Primera Preferente del fútbol regional.

El partido lo tuvo pronto de cara el Atlético Puertollano, cuando en el minuto 13 Abel ponía por delante a los suyos al cruzar el balón ante la salida del portero y anotar el primer tanto del partido. Ventaja con la que se llegaba al descanso pese a que los visitantes tuvieron dos buenas ocasiones de gol en las botas de Dani Romero en los minutos 19 y 42 de la primera mitad.

En la segunda mitad, y con el Cultural Valdeganga en busca del tanto del empate, los locales ampliaron distancias gracias a dos nuevos goles de Abel en los minutos 60 y 65 que dejaban el partido “sentenciado” para los atléticos, y eso que contaban con un jugador menos por la expulsión de Jesús en el minuto 52 por doble cartulina amarilla. Y se pone “sentenciado” entre comillas porque eso es lo normal en un partido en el que no participe el cuadro atlético, que se empeña en hacer “extraño” un partido más que asequible. Porque los locales se fueron a la caseta en el minuto 85 de partido. Hasta tal punto que en los minutos 86, 89  y 91 Fernando López y Dani Romero (en doble ocasión) anotaban los tres tantos que hacían que el partido acabara con un marcador de 3-3 y sin saber cómo era posible que una victoria se hubiera escapado de manera tan absurda. No se entiende. No se comprende. No se asimila. Pero el Atlético Puertollano es así, no queda otra forma para explicar tal sinrazón.