El término sánscrito Samatvam puede traducirse como ecuanimidad, equilibrio y estabilidad. En el Bhagavad Gita (El Canto del Señor), capítulo 2.48 y siguientes, se explican las tres dimensiones del yoga: karma o acción, conocimiento y devoción. Pero una palabra define todas ellas: Samatvam
Shri Krishna dice: “Oh Arjuna, firme en el yoga, renunciando a todo apego, permaneciendo en equilibrio ante el éxito o el fracaso, realiza tu deber. A estas ecuanimidad de la mente se la llama yoga”. En sánscrito, la definición de Yoga que hace el Bhagavad Gita es “‘Samatvam Yoga Uchyate”: la ecuanimidad de la mente es yoga.
El nieto adolescente de Shri Yogendra resume el Bhagavad Gita para mí
Hay un bello árbol, espléndido y frondoso, en la zona de recepción de The Yoga Institute, en el norte de la ciudad india de Bombay. A ese oasis de paz llegué por vez primera hace ahora 57 años. Y cerca de aquel árbol caminaba yo un día con el joven Patanjali, un adolescente de apenas doce años. Estábamos cerca, muy cerca el uno del otro cuando le pregunté: “Mi joven amigo, si tuvieras que resumir en una sola palabra todo el Gita, ¿cuál elegirías?” Y él respondió: “Samatvam. Allí, justo delante de tus ojos, escrito en una pizarra para que todos puedan verla”.
Este término, Samatvam, ha sido el espíritu guía de todos los venerables maestros que han enseñado en The Yoga Institute a lo largo de sus más de 100 años de historia. Vivimos por y para ello, lo enseñamos, lo sentimos, podemos tocarlo y con él ayudamos a cuantos entran en este recinto silencioso de paz donde reina Samatvam. Allí mismo, donde yo busqué aprender la sabiduría del Gita, el libro de la grandeza y el misterio.
El Bhagavad Gita consta de setecientos versos que enseñan al atribulado joven príncipe Arjuna los tres aspectos de la vida: la acción (karma), el conocimiento (jñana) y la devoción (bhakti). El Bhagavad Gita es por tanto un yoga tres en uno, en el que Sri Krishna explica al príncipe guerrero Arjuna una amplia exposición del yoga desde un punto de vista psicológico, en contraste con la visión metafísica que el sabio Patanjali refleja en sus Yoga Sutras. “No rehúyas el cumplimiento de tu deber, haz karma yoga”, le dice Sri Krishna al confundido devoto Arjuna. Y añade:
“Toda tu vida deseaste luchar contra tus malévolos parientes... Te preparaste para convertirte en un poderoso guerrero, entrenado para el combate por el gran maestro Drona-acharya, quien te reveló los secretos de Dhanurveda y te hizo el mejor arquero del mundo. Y aquí estás, perdiendo el control sobre ti mismo y escapando del campo de batalla.”
Nota del traductor.
El Bhagavad Gita, que forma parte de la epopeya hindú del Mahabarata, recoge en sus versos el diálogo entre el héroe Arjuna y el sabio Krishna, avatar del dios Vishnu. Arjuna contempla el campo de batalla en el que su ejército va a enfrentarse contra el ejército rival por el trono en disputa, pero él no quiere combatir, pues sus oponentes son sus parientes, amigos y maestros. De modo que Krishna le alecciona sobre el completo espectro de la naturaleza y el comportamiento humanos, abarcando aspectos como el cumplimiento del deber, las obligaciones del individuo, los efectos de las acciones, el desapego o el verdadero conocimiento. El Bhagavad Gita es un libro devocional para los hindúes y una lectura inspiradora para cualquier persona de cualquier cultura que esté interesada en comprender la complejidad de la naturaleza humana y en disponer de una guía vital práctica que le ayude en su camino existencial.
Harold Sequeira
Maestro de Yoga. The Yoga Institute. Bombay, India
Traducción: Juan Felipe Molina
