La salmonela puede causar estragos en tus intestinos
Les encanta viajar en verano, a pesar del calor. Hacen cola ante los restaurantes, las tabernas y las tascas de Madrid para pedir el aperitivo más apreciado, uno de los bocados estelares de la gastronomía popular española: la tortilla de patata. Con un buen pincho de tortilla española en el estómago, acompañado de una caña de cerveza o, por qué no, de una taza de café, estos viajeros extranjeros son capaces de aguantar horas y horas de turismo cultural para visitar los grandes museos y pinacotecas de la capital de España. Solo que, a veces, no es oro todo lo que reluce. Como cuando aquello que les sirven es una parodia del verdadero, del original y exquisito pincho de tortilla. Y ese sí que no te les va a dar energía ni para llegar a la esquina de al lado. Sobre todo si el cocinero no ha tomado las debidas precauciones y ha olvidado de la existencia de una molesta bacteria a la que le encanta anidar en ciertos alimentos: la salmonela.
¿Qué es la salmonela?
Bueno, no creo que quieras saberlo, aunque cuando la definamos, mostremos sus divisiones, sus tipos y subespecies, estarás en condiciones de viajar al vecino Marruecos para comer su cuscús, el plato de sémola de trigo que es un gran sustituto africano de la deliciosa tortilla española.
La salmonela es una bacteria que afecta el tracto intestinal y produce cólicos estomacales, diarrea y fiebre que pueden durar hasta siete días. Los humanos se infectan a través del agua contaminada, los alimentos, el medio ambiente, los animales u otras personas. En algunos casos la infección reviste mayor gravedad y puede ser necesario el tratamiento con antibióticos. Siempre es importante beber abundantes líquidos para evitar la deshidratación.
¿Cómo evitarla?
Cocina tu comida a más de 70ºC de temperatura y no almacenes alimentos sin refrigerarlos, porque por ellos viaja la astuta salmonela más rápido de lo que imaginas. Un amigo acumulaba en su casa comida sin conservarla ni cocinarla correctamente, de modo que la salmonela había instalado un campamento en su nevera. La tripa de mi amigo estaba tan podrida que rechacé sin contemplaciones el asqueroso arroz mohoso que me ofrecía en su mansión de Ibiza. He aquí el primer consejo: cuida en extremo y selecciona bien los alimentos que ingieres.
Brote de salmonelosis en Europa
La salmonela se atrincheró el año pasado en unos famosos huevos de chocolate y produjo varios cientos de infecciones por salmonelosis en Europa, con algunas muertes. Poco después la contaminación por salmonela obligó a cerrar la mayor fábrica de chocolate del mundo, ubicada en Bélgica. Así que a mis amigos que esperaban con ansiedad la llegada de los famosos chocolates europeos les recomendé que se abasteciesen de chocolates indios Amul, que son tan buenos, si no mejores, que los que se hacen en las estribaciones del Mont Blanc.
Prevención yóguica
Los sabios yoguis pueden darnos algunos consejos para mantener a raya la temida salmonela:
- Lávate bien las manos y los utensilios de cocina antes y después de manipular alimentos.
- Separa los alimentos crudos de los que están listos para comer.
- Ten cuidado con la manipulación y el consumo de huevos, solos o en combinación con otros alimentos.
- Cocina tu propia comida.
- Haz las kriyas yóguicas adecuadas para mantener tu cuerpo e intestinos limpios.
- Medita.
Y, ante todo, evita las invitaciones de amigos avaros que te sirven comida “vieja” o mal cocinada. Yo mismo te invitaré a una masala dosa, la deliciosa tortilla india hecha con harina, arroz y lentejas, siempre con un relleno vegetal, donde ninguna salmonela puede sobrevivir a su ardiente y suculento sabor.
Harold Sequeira
Maestro de Yoga. The Yoga Institute. Bombay, India
Traducción: Juan Felipe Molina
