La zona de interés

Son las 15:00 del Sábado, 27 de Abril del 2024.

La zona de interés

Por Gloria Serrano

“Probablemente la película más importante de este siglo, tanto desde el punto de vista de su enfoque cinematográfico como de la complejidad de su temática" (Alfonso Cuarón)

Abre la película un fundido en negro con la música desasosegante de Glazer y a continuación unas escenas luminosas de una familia alemana disfrutando de un día en el campo a la orilla de un río. Al terminar la jornada regresan a su casa. El problema es que esa casa está situada junto al muro del campo de concentración de Auschwitz y el padre de familia es Rudolf Hoss, el comandante del campo y el responsable de las políticas de exterminio que se aplicaron allí.

Ese juego de contrastes se mantendrá a lo largo de la película y frente a esa aparente normalidad de la vida familiar, las imágenes nos mostrarán pequeños detalles, diálogos muy sutiles, sonidos procedentes del campo, disparos, el humo de los hornos crematorios... Bastan esos detalles para que las imágenes idílicas y cotidianas de la familia se vuelvan sórdidas. La indiferencia con la que se desarrolla la vida familiar choca con las atrocidades que sabemos que se están cometiendo al otro lado del muro.

El sonido en esta película es fundamental, por un lado está lo que se ve y como trasfondo lo que se oye. Tan solo rompe la monotonía y la frialdad de las imágenes cotidianas unos planos de animación en blanco y negro en los que se introduce la presencia de una joven que roba alimentos y los esconde en lugares estratégicos para los presos que trabajan en el campo. Es un recuerdo a las víctimas y que recoge testimonios reales que el director ha introducido como subtrama.

Es una película inquietante, perturbadora, aunque no veamos nada sobre el Holocausto. Esta familia lucha por mantener su estatus y su forma de vida sin importarle el precio. Salimos impactados con la película, pero quizá debamos reflexionar sobre si en circunstancias similares no prevalecería nuestro bienestar, nuestra comodidad, nuestros intereses materiales. Creo que el monstruo sigue ahí y cabe preguntarse si no estaremos construyendo también un muro para huir de la realidad.

"La zona de interés" ha sido premiada con dos premios Oscar, al Mejor Sonido y a la Mejor Película Internacional, una muestra de que el tema del holocausto aún sigue inquietando.

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