Estos datos significan que "producimos el doble de la que consumimos, de lo que se deduce que Castilla-La Mancha podría autoabastecerse de energías renovables y eso supondría vivir en un ambiente con un aire de una calidad extraordinaria", ha explicado Cabezas, según ha informado la Junta en una nota.
Cabezas ha realizado estas declaraciones en la jornada "Energía y Calidad del Aire: diagnóstico y respuestas" que, organizada por la Fundación Naturgy, se celebra hoy en Guadalajara, la provincia en la que se encuentra el municipio de España con mejor calidad de aire y el tercero del mundo, Campisábalos, según un estudio de la OMS.
Solo dos municipios de los medidos a nivel mundial, uno de Finlandia y otro de Canadá, se encuentran por encima de Campisábalos en cuanto a calidad de aire, "lo que dice mucho en favor de esta tierra", ha subrayado el director general de Energía.
No obstante, Cabezas ha reconocido que hay muchos otros puntos de la región donde la situación es mejorable y, por ello, desde el Gobierno regional "estamos trabajando por conseguir un aire más puro y así mejorar la calidad de vida de las personas y la de las próximas generaciones".
En ese sentido, el director general ha reiterado la necesidad de apostar por nuevos modelos energéticos que supongan un freno al cambio climático.
Y ha puntualizado que ese cambio de modelo energético pasa "por un ahorro y eficiencia de la energía, sustituyendo el modelo de uso de la energía basado en producir, consumir y tirar, por uno que consista en minimizar, reducir la explotación de las materias primas y aprovechar al máximo los residuos".
A pesar de que, a nivel nacional, las emisiones de CO2 se han incrementado en más de un 15 % desde el año 1990, en Castilla-La Mancha estas emisiones han disminuido respecto a ese mismo año un 2,1 por ciento y respecto a 2005 se han reducido un 36 por ciento.
Desde el Gobierno regional se trabaja con un plan que contempla distintas líneas de actuación y que trabaja con conceptos como modelo sostenible, abandono de las energías fósiles, usos de energías renovables, democratización del sistema eléctrico fomentando el autoconsumo, ahorro y eficiencia energética, reducción de las emisiones o intensificación de la economía circular.
Según ha explicado el director general, ese plan está basado, por un lado, en la producción de las energías renovables a gran escala y, por otra, en las pequeñas instalaciones para el autoconsumo, para cuya puesta en marcha el Gobierno regional subvenciona un 40 %.
Dentro de esta línea de ayudas, este año se van a conceder dos millones de euros para la puesta en marcha de este tipo de instalaciones, la mayor parte de ellas para pymes.
En el ámbito del ahorro y la eficiencia energética, el Ejecutivo regional tiene también varias líneas de ayuda para el cambio de calderas tradicionales por otras más eficientes, sustitución de ventanas en edificios o cambio de alumbrado público.
Asimismo se establecen ayudas para el transporte eficiente tanto para la compra de vehículos, como para la puesta en marcha de infraestructuras de recarga.
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